Articulación entre educación básica y media a través del programa de asignatura

Autor: Ticas, Pedro.

Categoría: Investigaciones institucionales

Extracto: La Universidad Pedagógica Dr. Luis Alonso Aparicio comprende que los temas de la educación en general y de educación superior en particular, hoy en día no pertenecen únicamente a la esfera de lo nacional, en realidad, su carácter supranacional los convierte en unidad y opuesto de lo multinacional. La globalización y regionalización, con carácter predominantemente económico, obligan a intelectuales, académicos e investigadores a la articulación de procesos de investigación con temas afines y definitivamente necesarios para el conocimiento compartido tanto en el ámbito académico como social. Pero el mundo complejo de la educación escolarizada y no escolarizada en cualquiera de sus niveles académicos y no académicos obliga a una revisión holística, pero también concreta de todos los elementos que conforman la dinámica permanente de las sociedades, esto obedece a la indisoluble articulación que se halla entre las esferas de la vida humana (salud, vivienda, ecosistema, economía, política, etc.) y la educación como constructo epistémico PRINCIPIOS GENERALES que rige la transformación del hacer en saber. Precisamente en la articulación de todos esos elementos que hacen posible la existencia de la vida humana, los procesos educativos se tornan más complejos tanto en forma como contenido. Forma y contenido se resuelven desde las particularidades y singularidades territoriales, en las cuales, la educación escolar y no escolar se unen a través de las diversas esferas de la vida de la población. “Hoy en día, en el plano epistemológico discutimos sobre tres tipos de verdades: las empíricas que se formulan por la observación y verificación (Ciencias Naturales, Ciencia Educativa, Ciencias Económicas y Ciencias Sociales), las Formales basadas en la coherencia interna de los enunciados (Lógica y Matemáticas), y las Existenciales o de Sentido (a las que se llega por los métodos hermenéuticos y fenomenológicos)1, independientemente de sus propios alcances o limitaciones, las tres son indispensables para comprender lo que significa el conocimiento humano”